Alpargatas

Yo quise ser viento para rozar tu cuerpo y enmarañar tu pelo..
Te canté al oído nanas prohibidas
Pa soñar despierto...

Encuentro un vacío lleno de nada.
Alpargatas rotas, por canciones tristes.
Caminando sin dejar ni un paso atrás, a la locura del querernos descubrir.
Y cansado de bailar siempre con la misma duda, cambio de balada y acompaño con un tango a Soledad que siempre está libre y pregunta por mi.

Ni Un Recuerdo

 

La amargura del olvido en tu memoria nos trastoca la vida, agudiza el cariño. Retoma senderos otrora embarrados por el orgullo cegador que los anegaba. Ahora brota como las pequeñas flores de primavera el dolor de unos años amargamente malgastados.

Hoy, por fin me atrevo a volver, cuando no distingues ni quien soy ni lo que soy ni lo que una vez fui, ni por supuesto quien seré mañana para ti.

Estarás aquí cuando atraviese la puerta, como hoy, me regalarás la misma sonrisa de siempre y seguirás mirando al viento con esos ojitos tristes que denotan la edad.  Hace tiempo que me llegó al pelo el gris y cabezotas, no nos dimos la oportunidad de regalarnos un abrazo.

El olvido de tu memoria crea pensamientos tristes, sentimientos encontrados que ya creía perdidos en el pasado.

Un sentimiento de culpa eriza mi vello, y tú, sigues a lo tuyo, no recuerdas nada, ¿Cómo poder pedirte perdón?

Noto esa lagrimilla voltear mis pestañas al acercarme a la puerta. Antes me giro y te observo por última vez, tú quedas ahí, abstraído en el horizonte lejano de tus pensamientos. Como el que ve llover.

Perdona todos estos años perdidos.

Momentos

Una caricia perdida
Por los hilos
Que han descosido mi vida;
Sueño que acaricio tu pelo,
Que escucho tu voz.
Que sí, que siempre llego tarde,
A la deshora que marca el corazón.
Apuro la última copa,
Suspiro y tiemblo.
Recuerda mi niña...
Llegado el momento
Olvida a Caronte,
Búscame a mi
en el horizonte.
Haz el favor,
Deja al barquero.
No te quiere más que yo.
Ni tampoco te necesita.

Destino

Siento que la quiero
Que la echo de menos
Por qué todo es tan cruel?
Que en el infinito
Nunca está conmigo
Y eso no puede ser.
Viva el egoísmo,
La quiero conmigo,
Me importa un bledo
Lo que lleguen
A decir....
Los degenerados,
Los picapedreros.
Los que el alma perdieron.
Los que sólo saben joder.
Que quiero estar contigo
No es un desatino,
Elijo mi destino.
Lo que yo quiero.
Ser ese niño
que sueña con vivir
Cerca de tu ombligo.

Día a Día

El cielo se nos desprende a trocitos
Desde el olvido en que nos convertimos;
Día a día, pasito a pasito.
Cuando cruzamos el umbral,
Sin remedio, en los albores del tiempo.

 

Sueños de Nada

Ayer tuve un sueño. Me crucé contigo y al pasar,  la luna se vino a mirarnos, despechada con celitos del mar que se vio reflejado en tus ojos.

Tus ojos de gata giraron, tu sonrisa me hizo vibrar, tu perfume me llevó en volandas como a las nubes el viento al soplar. El ébano de tu pelo, negro como el betún me rozó la mejilla, me rompió el corazón en trocitos de nada, una nada viajera que se fue a posar en tu ventana.

En ese sueño charlamos, tomamos un poco de ron y después largo tiempo caminamos, disfrutando de una majestuosa  puesta de sol.

Calíope

Se hace largo el camino sin ti. Me vuelvo a desequilibrar.  Hace daño el frío del vacío de tu colchón cada noche. El vacío pesa demasiado sin ti. Busco en un lugar recóndito de mis entrañas ese trocito de nuestra historia que me haga recordar los versos que me dictaba tu boca, que me evite ser pan de ayer, agrio vino picado, deambulando sólo, rodeado de gente que me observa indiferente. Quisiera esquivar ese sentimiento de vil despojo. Sigo agazapado, sudando muerto de frío, esperando un cálido beso a contraluz a la hora de las hadas. Para que vuelvas.