Vengo a escupirte mis canciones,
Vengo a dormir frente a tu puerta,
Vengo a pedirte un trago y algo de paciencia.
Vengo a decirte que no duermo
Porque me ahogo en mi tristeza,
Debería sonreír pero me cuesta
La Fuga. Vengo
Vengo a dormir frente a tu puerta,
Vengo a pedirte un trago y algo de paciencia.
Vengo a decirte que no duermo
Porque me ahogo en mi tristeza,
Debería sonreír pero me cuesta
La Fuga. Vengo
Quiero cubrirte en mi fuego
Sabiendo que el saber
No sirvió para gozar el cuerpo.
Para trazar la línea de la lid.
Que se marchita la pena en el querer.
Querer que venga el después,
Que no se vaya cuando fugue la luna.
Para emponzoñar su mirada
Queda la mañana traicionera,
Que viene a jodernos con su júbilo
A la vez que nos despierta del sueño.
Del sueño de las olas que nacen de tus poros,
Llegando bravas a romper en los míos.
El sueño de rozar tu mirada
De poder verte otra vez.
Para contarte mis chanzas,
Endulzarnos con una copa de licor
Turbio y amarillento,
El humo de mil cigarros
Y verte reír.
Hacerte reír y crear versos para ti.
Turbio y amarillento,
El humo de mil cigarros
Y verte reír.
Hacerte reír y crear versos para ti.
De madrugada te leo y es como entrar en otro mundo. Plácidamente hermoso poema.
ResponderEliminarBesos siempre.
Es tan fácil colgarme de sus sueños,
Eliminarborrar todas las nubes que apagan sus días,
pintar en tu cielo un sol por las mañanas...
mirar al cielo al caer la madrugada.
Gracias María.
Besos siempre